Reto Módulo 3: “Decálogo Gobierno Abierto”

En este tercer reto que nos ocupa, mi aportación para elaborar un Decálogo de valores, acciones y hábitos del personal público comprometido con el Gobierno Abierto, construido entre todas las personas que formamos parte de esta comunidad de aprendizaje gira en torno a mi ámbito de trabajo, la igualdad de género.

Mi propuesta consiste en diseñar y desarrollar una estrategia de transversalización de género en el ámbito de la participación ciudadana, aplicando la perspectiva de género en toda su actividad.

Se trata de incorporar la perspectiva de género en el diseño y desarrollo de nuevos instrumentos de participación, así como al funcionamiento de los ya despegados, priorizando los procesos deliberativos y los consejos ciudadanos. Se hace preciso, por tanto, ajustar y/o redefinir los indicadores de evaluación de los instrumentos de participación y de las acciones llevadas a cabo, así como comunicar e informar con un enfoque intersectorial, incluyendo las políticas de transparencia y datos abiertos.

El objetivo no es otro que remover los obstáculos que impiden o dificultan la plenitud en el desarrollo y ejercicio de estos derechos, facilitando la participación de todas las mujeres en la vida política, social y económica en igualdad de condiciones para conseguir una igualdad real y efectiva entre mujeres y hombres.

En cuanto a las propuestas que he elegido para formar parte de nuestro decálogo, paso a detallarlas a continuación, aunque pudieran ser muchas más:

Fomentar la participación de la mujer en la vida pública

No cabe duda de que la transparencia posee un enorme poder de transformación social y política. La incidencia directa en la rendición de cuentas, las dificultades que impone a la corrupción, así como el efecto que tiene en una ciudadanía vigilante, más informada, y en consecuencia más participativa, conlleva una toma de decisiones más eficientes que repercuten en el diseño de políticas públicas que pueden construir una sociedad más igualitaria y justa. Sin embargo, esto sólo es posible cuando toda la ciudadanía accede a la información en situación de igualdad.

Teniendo en cuenta la existencia de una brecha de género en el manejo de las herramientas de transparencia (la participación en el derecho a la información pública por parte de las mujeres es diferente y menor que la de los hombres), corresponde a la Administración y los poderes políticos garantizar el ejercicio de este derecho mediante el desarrollo de políticas y acciones concretas de difusión, formación y sensibilización, fomentándose, de esta manera, la participación de las mujeres en el control de la actividad de las instituciones públicas

La próxima revolución será feminista o no será y, para ello la transparencia es fundamental.

Lenguaje sencillo y claro

Estoy completamente de acuerdo con todos y cada uno de los aspectos que indica Alberto.

Las administraciones públicas se caracterizan por utilizar un lenguaje administrativo, inaccesible para la inmensa mayoría de la ciudadanía. Resulta, por tanto, imprescindible romper esta barrera para garantizar la comprensión del mensaje.

La lectura fácil. y el lenguaje claro y sencillo son fundamentales para el Gobierno Abierto, pero, además, se han de utilizar otros recursos que faciliten la comprensión de la información (infografías, gráficos, contenidos multimedia, audiovisuales, etc,) e incluso realizar una simplificación administrativa en todo el proceso.

Y qué decir de la utilización del lenguaje no sexista, resulta fundamental en todos los ámbitos de nuestra vida.

Educación tecnológico-administrativa como premisa fundamental

El Gobierno Abierto presenta muchas potencialidades y está llamado a ser el eje fundamental sobre el que se desarrolle la sociedad del futuro, pero para conseguir su correcta implementación se requiere un profundo cambio de cultura organizativa.

La formación continua en este ámbito es fundamental para la ciudadanía en general y para el personal público en particular.

Convertirnos en agentes dobles al servicio de la transparencia.

La Transparencia debe formar parte de la cultura organizativa. Se ha de promover, por tanto, entre el personal público, interiorizándola y poniéndola en práctica, tanto hacia fuera como hacia dentro de la propia organización.

Publicación datos desagregados por género

Disponer de datos desagregados por sexo es fundamental para conseguir erradicar la brecha de género que existe en el derecho de acceso a la información pública.

La ausencia de datos desagregados por sexo no sólo perpetúa estereotipos, sino que invisibiliza y oculta la participación y actividad de las mujeres.